miércoles, 25 de febrero de 2015

Macarrones a la Vongole Veraci, versión Kakun!!!

(vamos que... macarrones con almejas en salsa verde y tomate... exquisitos!!!!)

Buenas noches!

Hoy os voy a enseñar cómo hacer uno de los platos que más nos gustan a mi hermana Bego y a mí.

En uno de los tantos viajes que mi aita hacía a Italia en el que fuimos con él y con mi ama, Bego probó en un restaurante pasta a la vongole veraci. Le encantó!!!! Y no paro hasta que mi ama dio con la receta. Así que mi ama se puso en marcha y nos consiguió esta receta exquisita de manos de una mujer maravillosa italiana, Anita. Mis aitas eran muy amigos de un cantante de ópera, Luigi Alba, y de su mujer Anita la cual es italiana y una maravillosa cocinera. Ella nos explicó cómo hacerla y yo la he adaptado a nuestra forma de comer, vamos he adaptado la receta para que sea apta para una dieta hipocalórica. Bueno, casi apta... Para ser apta del todo deberíamos hacer nosotros la salsa de tomate.

Ahí vamos!

Los ingredientes que necesitamos son:

  • aceite de oliva virgen
  • sal y pimienta
  • guindilla de cayena, si nos gusta el picante
  • 1 lata de tomate
  • macarrones, o la pasta que más nos guste, (utilicé lo que me quedaba en el paquete)
  • ajo
  • perejil
  • almejas o chirlas (yo utilicé medio kilo de almejas)


Primero os tengo que decir que el tomate que se utilice para este plato tiene que ser un tomate que no sea muy dulce. Aunque también queda rico con un tomate dulce queda mucho mejor con una salsa de tomate un pelín ácida.

Éstos son los tomates que a mí más me gustan para este plato:



 


Pero, claro, estas salsas de tomate llevan mucha azúcar y no son aptas para hacer una dieta como es debido. Pero si no hay más...

El otro día vi en el super un tomate orlando que me pareció que no tenía azúcares añadidos y bajo en sal, pero no lo he probado. La próxima vez lo utilizaré y veremos qué tal...


Como podéis ver en la foto de los ingredientes, en esta ocasión yo no tenía en casa ninguno de los tomates que he detallado anteriormente así que utilicé el que tenía en casa que también es de la marca Helios, receta artesana con aceite de oliva. La verdad es que quedó rica pero me gustan más los otros tomates.

Si os gusta el tomate natural sin freir también se puede utilizar, vamos que utilicéis la salsa de tomate que más os gusta!!!

Lo primero que hacemos es poner en un bol las almejas o chirlas, desechando las que estén rotas o abiertas que no se cierren al golpearlas. Yo en este caso compré almejas porque no había chirlas, pero para ser sincera me gusta más el sabor que dan las chirlas.


Les añadimos agua fría


Y echamos un puñadito de sal.


Picamos perejil fresco, si tenemos. Lo mejor es utilizar fresco, pero si no hay en casa y tenemos antojo pues le añadimos perejil seco, no pasa nada.


Picamos bien de ajo, como mínimo tres o cuatro dientes para una o dos raciones. En casa nos gusta mucho el ajo, así que yo añado bastante. En este caso añadí lo que podéis ver en la foto.


Ponemos una cucharada de aceite de oliva en la sartén o wok o cazuela y el fuego en vez de ponerlo a tope ( número 9), lo pongo al ocho para que no se me queme. En caso de que no tengáis que contar el aceite utilizado al día, echad dos o tres cucharadas de aceite que queda mucho más sabrosa.



Añado los ajos al aceite y revuelvo para que no se me quemen porque si se queman amargan el plato y nos lo destrozan.


Cuando ya están doraditos como podéis ver en la foto


Añadimos las chirlas o almejas, escurridas, claro! Antes de añadirlas, les quitamos todo el agua salada en la que estaban.


Añadimos el perejil y esperamos que se abran las chirlas o almejas.


Si vemos alguna rota, la desechamos.


Esperamos que se abran,



y cuando ya estén abiertas añadimos la salsa de tomate que más nos gusté. Yo en este caso añadí la que veis en la foto.



Rebaño bien lo que queda en el bote, añadiendo algo de agua para coger bien todo el tomate.


Y ya tenemos nuestra salsa hecha, sólo falta:

  • salpimentar al gusto
  • añadir si nos gusta una guindilla de cayena.


Dejamos que hierva para que se unan todos los sabores, sin que se consuma mucho la salsa.


Cuando ya la tenemos y la hemos probado y nos gusta la apartamos del fuego y cocemos la pasta.


Ponemos agua a hervir. Yo no echo ni sal ni aceite, pero eso a gusto del consumidor.


Ésta es la pasta que tenía en casa, así que es la que utilicé. Son macarrones integrales. En casa nos gusta mucho la pasta y el arroz integral y aunque en la dieta podemos comer cualquier pasta y cualquier arroz siempre nos recomiendan comerlo integral, así que como nos encanta, pues integral.

Cuando compremos pasta o arroz integral es muy importante comprarlos de cultivo ecológico o biológico. Para saber si nuestra pasta es de este tipo de cultivo tenemos que ver en el paquete ese dibujito verde con una hoja en puntos amarillos que aparece en la foto, en la esquina inferior derecha según miramos la foto.



Una vez que el agua esté hirviendo, echamos la pasta y la dejamos hirviendo el tiempo que nos recomienden en el paquete.


Removemos la pasta para que no quede pegada y la dejamos hirviendo, en este caso 10 minutos.



Una vez que ha pasado el tiempo, escurrimos la pasta y la añadimos a nuestras salsa que tendremos ya caliente.


Revolvemos bien y dejamos que hierva un poco la salsa con la pasta para que los sabores se impregnen.




Y ya tenemos nuestra pasta hecha!!!!


A servir y a la mesa!!!!


De verdad que este plato resulta exquisito!!!! Probad a hacerlo, es muy fácil y delicioso!!!! La pasta está rica, pero chupar las chirlas o almejas con esa salsa... uuuummmmm de rechupete!!!!

Espero que os guste.

Otro día os enseño a hacer una maravillosa, deliciosa, ligera y reconfortante sopa de pollo que hago una vez por semana para poder cenarla en casita mientras veo Puente Viejo con Iña en nuestro super sofá...

Gabon


viernes, 20 de febrero de 2015

Bolsas de viaje para zapatos de caballero!!! 
Impresionantes...

Hoy os voy a enseñar las bolsas para zapatos que he hecho para que Iñaki lleve en la maleta cuando se vaya de viaje.

El próximo fin de semana se me van Koldo e Iñaki a Irlanda. Se van a ver un partido de rugby al Aviva Stadium de las seis naciones. Están nerviosos, ilusionados y muy muy contentos. A los dos les encanta el rugby; Iñaki jugaba cuando era más joven y Koldo juega ahora; ambos van a los partidos de Koldo, él a jugar y su padre a verle. Es pasión lo que sienten por el rugby, así que yo también estoy feliz de que vayan los dos juntos a disfrutar de su deporte favorito. Es algo que ninguno de los dos olvidará jamás, estoy segura.

Bueno, pues a lo que iba... A cuenta de este viaje les he hecho unas bolsitas de viaje para que lleven los zapatos en la maleta. De momento he hecho tres pero les tendré que hacer más porque cuando los Muji-Amann viajamos lo hacemos con la casa a cuestas...

Espero que os gusten, son muy fáciles de hacer y el resultado ha sido fantástico.

Bueno, primero deciros que las telas que compré para hacer estas bolsas son unos damascos maravillosos que compré por internet en la página que os detallo a continuación:

http://www.siglobarroco.com/cat-47-damascos.html

Compré un damasco granate y otro rosa pálido. No los conocía y cuando los recibí me parecieron impresionantes!!! Tengo que advertiros que los colores del damasco granate a veces, dependiendo de la luz con la que he sacado las fotos, cambia un poco y parece morado. Pero no, es granate.

Tienen 280 cm de ancho y su precio es de 22 euros el metro.

No son baratas pero el resultado es brutal. Para un vestido necesitaríamos dos largos de tela, así que con algo menos de 2 metros hacemos el vestido. 44 euros no es un dineral para un vestido con estas telas, así que habrá que hacerse uno... Tengo boda en Junio, así que me haré el vestido para la boda con estas telas, ya os enseñaré...

Éstas son las dos telas que compré.


Lo primero que hice es sacar un patrón.

Como no sabía muy bien qué medidas dar a las bolsas cogí una bolsa de zapatos que tenía Iñaki guardada y calcule el doble para mi patrón puesto que la bolsa que cogí del armario era para un zapato.


Hice mi patrón tal y como podéis ver en la foto.


Empezamos:

Ponemos el patrón encima de la tela planchada y del revés.



Pintamos el patrón en la tela dejando un centímetro de margen de costura en los bordes por donde se coserá el patrón.


Pero en la parte superior de la bolsa, lo que pintamos es el borde de la bolsa y luego una vez quitado el patrón pintamos a dos centímetros la línea por la que doblaré el borde y haré el dobladillo. No sé si me he explicado bien, espero que con las imágenes os parezca fácil.



Una vez tenemos ya todo pintado, excepto la línea superior para el dobladillo, cortamos la bolsa.


En la siguiente foto se ve la línea por la que os digo que luego doblaré la tela para hacer el dobladillo.


Pintamos la línea por las dos caras de la bolsa.



Elegimos un hilo que le vaya bien a la tela y cosemos las costuras y las sobrehilamos.



Aquí tenéis las costuras cosidas:

  Y aquí sobrehiladas.


Luego hacemos el dobladillo de la parte superior de la bolsa. Doblamos la tela hasta la línea que tenemos pintada.


Y le damos otra vuelta, como si hiciésemos un dobladillo de pijama o vestido.


Pasamos a máquina el dobladillo de la boca superior de la bolsa.

 
Después a unos 3 ó 4 centímetros, como prefiráis pero yo lo hice a 3, del borde de la bolsa pintamos una línea por todo el contorno de la bolsa, tanto parte delantera como trasera.


Hice lo mismo para tres bolsas.


Cortamos una tira de tela que sea algo más estrecha que todo el contorno de la bolsa y de 3 centímetros de ancho (el medio en la foto) y damos 2 centímetros por arriba y 2 por abajo para poder hacer el dobladillo de la cinta.


Doblamos las esquinas y cosemos.




Luego doblamos la parte superior y la inferior doblando dos veces la tela. Como los dobladillos.




Por arriba y por abajo, pasando todo a máquina.



Marcamos la mitad de la tira para colocarla exactamente en uno de los bordes de la bolsa.


Colocamos la tira en la bolsa justo encima de la línea que habíamos dibujado, tal y como veis en la foto.



La sujetamos con alfileres o si no os arregláis bien pasamos un hilván.



Y la cosemos a máquina, quitando después el hilván.


Y ya tenemos nuestra bolsa hecha. Ahora sólo nos falta comprar un cordón que le vaya bien y unas cuentas bonitas para sujetar el cordón y poder cerrar bien la bolsa.


Aquí tenemos el cordón y las cuentas.


Metemos el cordón en doble por la cinta que hemos cosido a la bolsa.


Metemos por un lado de la tira y sacamos la cinta por el otro. Una vez que ya la tenemos metemos las cuentas por la cinta, damos un nudo y quemamos las puntas del cordón o cinta para que el nudo no se nos suelte nunca.


Y ya podemos fruncir nuestras bolsas.


Ahí tenéis de cerca el frunce de la bolsa con el cordón y la cuenta que lo sujeta.


Compré tres cuentas diferentes del mismo tono, una para cada bolsa.



Y ya sólo nos falta meter unos zapatos y ver cómo nos quedan.




Aquí tenéis la bolsa de viaje que he hecho para Iñaki y sus zapatos. La verdad es que me han gustado mogollón cómo han quedado.



Lo malo es que me gustaron tanto que ahora ya tengo en mente hacer tres más granates, unas rosas para mis zapatos y alguna bolsa más para la ropa interior. Si es que no me da la vida...

Bueno, espero que os hayan gustado!!!

La próxima entrada colgaré alguna receta para Juan Carlos...

Gabon.